La danza contemporánea es una disciplina que se caracteriza por la libertad y la creatividad en la expresión de movimientos. Aunque está basada en la técnica de la danza clásica, se aleja de las estructuras rígidas y preestablecidas para dar paso a la interpretación personal del bailarín.
Durante las clases de danza contemporánea, se trabaja en la exploración de movimientos que puedan expresar emociones y sensaciones. Esto implica una gran variedad de movimientos, desde los más suaves y fluidos hasta los más intensos y enérgicos.
En la danza contemporánea, el bailarín es libre para explorar la conexión entre su cuerpo, su mente y su espíritu. A menudo, se utilizan elementos teatrales y de improvisación para crear una experiencia única y personal para el bailarín y el público.
La danza contemporánea también se preocupa por la conexión entre el bailarín y la música. Se busca que los movimientos fluyan en armonía con la música, para crear una experiencia estética completa. En este sentido, se utilizan una gran variedad de estilos musicales, desde la música clásica hasta la electrónica.
En las clases de danza contemporánea, se puede encontrar diferentes niveles, desde principiantes hasta avanzados, y se adaptan a las necesidades y habilidades de cada persona. Además, las clases pueden ser una actividad enriquecedora y creativa para cualquier persona interesada en explorar su cuerpo y expresión artística.